El Panteón de Agripa, emplazado en pleno corazón de Roma, es una de las maravillas de la capital de Italia… y eso es mucho decir en una ciudad con tanta joya monumental y arquitectónica. Probablemente sea de los edificios mejor conservados y su cúpula es un tesoro incomparable, uno de esos milagros de los artesanos de la antigüedad que todavía sorprenden a expertos de todo el mundo.

El Panteón de Marco Agripa en Roma

El Panteón fue uno de los monumentos que más nos fascinaron de Roma. Contemplando su imponente aspecto nadie sería capaz de decir que tiene más de 2.000 años. Está perfectamente integrado con el entorno y siempre está rodeado de turistas fascinados con su grandeza y sus formas perfectas.

La paloma y el Panteón de Roma

Quizá suene a tópico, pero es una de las visitas imprescindibles de cualquier viaje a Roma. Llegar hasta el Panteón es bastante sencillo. Sólo tienes que pillar un autobús o el tranvía que te deja en Largo di Torre Argentina. Desde allí, el recorrido hasta la Piazza della Rotonda está perfectamente señalizado y es muy agradable. Pasear por la ciudad eterna es uno de los mayores placeres que el viajero se puede regalar en esta ciudad.

La cúpula del Panteón de Roma

Su nombre completo es el Panteón de Marco Agripa, aunque durante mucho tiempo fue conocido como el templo de Adriano. Este emperador mandó construir el actual monumento sobre el templo original dedicado a todos los dioses, de ahí su nomenclatura. Más de 2.000 años en pie y todavía no se entiende cómo pudieron levantar esa maravilla de cúpula, la mayor bóveda de mampostería jamás construida por el hombre.

Turistas contemplando el Panteón de Roma

Como pasa con las estrellas más centelleantes, el problema del Panteón reside en que es admirado por demasiada gente. La Piazza della Rotonda y sus alrededores son un hervidero de gente, con cámara en mano, dispuesta a todo por una buena foto. Es una plaza muy coqueta y pintoresca donde se respira un ambiente cosmopolita muy embriagador. Merece la pena pasar allí un buen rato contemplando los rostros de los turistas, mezcla de asombro y cansancio.

A la sombra del Panteón de Roma

Nosotros estuvimos reponiendo fuerzas un buen rato cerca del Panteón. Seducido por su embrujo, aprovechamos para hacer fotos y entrar muchas veces a ver la cúpula. La entrada es gratuita. A ras de suelo, el Panteón, otrora dedicado a todos los dioses clásicos,  es «sólo» una iglesia más de Roma. Eso sí, actualmente sólo rinden culto a un Dios. Se ha perdido su esencia, pero no su presencia. No te puedes ir de la ciudad sin visitar el Panteón de Agripa, una de las maravillas de Roma.

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Pau García Solbes
Soy periodista y bloguero de viajes profesional. Soy Licenciado en Ciencias de la Información en la especialidad de Periodismo. He trabajado y colaborado en numerosos medios de comunicación en temas relacionados con Internet, nuevas tecnologías y turismo. Además, soy co-autor del libro Viajar con niños, el manual para preparar tus vacaciones en familia de La editorial viajera.

8 COMENTARIOS

  1. Es un sitio espectacular. Lastima que no te dejen tumbarte para contemplar la cupula…podreis intentarlo pero os pillaran muy prontico

    Los alrededores tambien merecen la pena. Ambiente muy animado y la oportunidad de probar el que dicen es el mejor cafe del mundo, en una cafeteria muy cercana…pero con cuidadin pq es bastante caro y el mejor el mejor no se yooo, no diria yo tanto!!

    saludos!

  2. @Javier, es flipante como está por dentro y por fuera. La cúpula se mantiene intacta tras ¡¡¡2.000 años!!!

    @JoCkEy, la cantidad de cosas que tiene Roma son para montar una ciudad museo. Lo que te cuentan tus amigos es completamente cierto.

    @Chiqui, lástima que el café no esté entre mis predilecciones. El gelato es otra cosa 😉

  3. Tengo amigos viviendo en Italia y precisamente comentan eso, que unas ruinas que aquí serian un centro turístico allí simplemente son eso, ruinas y nadie las mira porque tienen un millón mas mucho mas impresionantes.

    Saludos!

  4. Uno nunca dejará de maravillarse por estas obras de la arquitectura, que perduren a lo largo de los años. Un pedazito mas de la historia de la humanidad y de una belleza sin igual.

    Que ganitas de visitar Roma 😛

  5. Esa última frase me ha gustado mucho…»se ha perdido su esencia, pero no su presencia».
    Tengo una cuenta pendiente con Italia, especialmente Roma. Recuerdo en mis años de estudio que mi profesor decía que «Roma es maravillosa aunque sales empachado, pero que empacho más reconfortante».
    Muchas gracias por el enlace!! Un abrazo!!

  6. @Nuria, de verdad que Roma merece mucho la pena. Realmente puedes salir empachado de monumentos y arte, pero es una ciudad con muchas caras. Gastronomía, noche, gente… lo tiene todo 🙂

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