Vero subiendo las escaleras del Engaku-ji

De templo a templo y tiro porque me toca, que para eso estamos en Kamakura, una de las localidades con más templos de Japón. El siguiente en nuestra visita a esta bellísima ciudad de la prefectura de Kanagawa fue el Engaku-ji.

Para acceder hasta él desde el Hase-dera, no tuvimos que hacer viajes imposibles. Simplemente volvimos a la estación de Kamakura y desde allí pillamos un tren hasta Kita-Kamakura. A mano izquierda, nada más salir de la estación encontraréis las escaleras que ascienden hasta el Engaku-ji. La entrada al recinto cuesta 300 yenes.

Monje en el Engaku-ji

Este fantástico templo pertenece a la orden zen Rinzai y eso se nota en la tranquilidad y en los preciosos cantos de los monjes que pudimos escuchar mientras paseábamos por el Engaku-ji. De los recuerdos más serenos de nuestros viajes a Japón.

Mientras paseábamos por el templo, contemplamos una clase práctica de pintura o dibujo para gente mayor. Me sorprendió ver lo bien que dibujaban y la paciencia que ponían en cada trazo, supongo que la tranquilidad del Engaku-ji ayuda.

Dibujando la puerta San-Mon

De este templo destacaría tres elementos. La puerta de San-Mon, la espectacular campana de Engaku-ji, que es la mayor de Kamakura, y los preciosos bosques que arropan al templo. A diferencia de las visitas al Daibutsu y al Hase-dera, aquí no había casi turistas, y reinaba un ambiente de paz y tranquilidad.

Para los amantes de la historia, el Engaku-ji se fundó en 1282 con el objetivo de que los monjes zen pudieran rezar por los soldados que dieron su vida para defender Japón de los ataques de Kublai Khan. Recordad que la mayoría de la flota de los mongoles quedó destruida por un «viento divino» que llamaron kamikaze. Más bien fue un tifón.

La gran campana Engaku-ji

No sé si realmente los rezos que se llevaron a cabo tuvieron mucho o poco que ver con la victoria de Japón, lo que si está claro es que este templo es ideal para pasar un par de horas tranquilo, empapándote de energía zen y olvidándote del mundanal ruido. Muy recomendable para vuestros viajes a Japón.

10 COMENTARIOS

  1. Los templos de Kita kamakura me gustaron mucho.
    Si conoces a gente que le guste o practique Karate, en el Engakuji está el monumento a Funakoshi, creador del karate moderno 😉

    Por cierto, que ya llevo un rato comentando por aquí jeje decirte que me está encantando tu blog ^_^ revivir Japón me encanta!

    Y después me pasaré por el resto a ver que ideas tomo para futuros viajes jeje

    • Muchas gracias, da gusto tener a lectoras como tú que dejan tantos comentarios y me hacen revivir las experiencias de mis viajes.

  2. @macasol, com deu ser, es que eres ma mare 🙂

    @nora, el abuelito me causó mucha impresión, iba caminando lento pero seguro. Como nosotros íbamos parando a hacer fotos, nos adelantaba cada vez y no sonreía jajaja

    @jj, no tiene nada que ver, intentaba ser poético jajaja Te has cargado el momento zen 😉

    @lorco, la verdad es que parecía muy viejuno, esa barba tiene ya muchos años 🙂

  3. @nora estoy seguro que el abuelete tenia casi, casi los mismos años que el templo. Me encanta como «sonríe» y posa para la foto! pedazo de estampa y temple

  4. «Este fantástico templo pertenece a la orden zen Rinzai y eso se nota en la tranquilidad y en los preciosos cantos de los monjes que pudimos escuchar mientras paseábamos por el Engaku-ji.»

    que tiene que ver que sea de una orden con que se note no se que???

  5. Información Bitacoras.com…

    Valora en Bitacoras.com: De templo a templo y tiro porque me toca, que para eso estamos en Kamakura, una de las localidades con más templos de Japón. El siguiente en nuestra visita a esta bellísima ciudad de la prefectura de Kanagawa fue el Engaku……

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.