Entrevistamos a Manuel Jalon de Naaî Travels

Asia es una de nuestras pasiones. Desde que viajamos con niños siempre tenemos puesto el periscopio hacia nuestro continente favorito buscando nuevas aventuras y Tailandia es, quizás, donde tenemos puesto el foco actualmente. El septiembre pasado ya estuvimos por Bangkok y seguramente este año ha llegado el momento de descubrir otras partes del país con nuestros hijos.

Tailandia es un destino muy popular para ir de vacaciones en familia, especialmente para viajeros de Europa y otros países occidentales. Es un lugar del planeta que se puede considerar seguro para viajar por libre si tomas las mismas precauciones que en cualquier otro sitio y prestas atención a las diferencias culturales. Además de exótico, es un país moderno con todos los servicios que puedas necesitar durante el viaje y por supuesto tiene muchos atractivos para los niños además de las playas. Antes de nuestro más que probable viaje a Tailandia con niños de este verano, hemos querido conversar con Manuel Jalon de Naaî Travels, una agencia especializada en este destino del sudeste asiático.

Hola Manuel, supongo que te lo han preguntado mucho, pero ¿a partir de qué edad recomendarías viajar a Tailandia con niños?

La verdad es que aquí se ven niños muy pequeños, depende de los padres. En mi opinión, cuando tienen 3 ó 4 años o menos no se enteran como cuando tienen alguno más y el viaje debe planearse conforme a lo que les apetece a los padres. A partir de los 5 ó 6 van a disfrutarlo todos mucho más.

Con los más pequeños, como en cualquier viaje, hay que echarle un poco de imaginación para sacar partido de lo mucho que se van a encontrar. En las visitas a monumentos históricos y monasterios budistas van a encontrarse con estatuas de seres mitológicos de muchas clases, seres mitad pájaro mitad hombre, gigantes con cara de pocos amigos, enanos, etc. Se trata entonces de inventarse historias para añadir algo de misterio y encanto a la visita.

Hace poco veía una familia francesa en la que los dos hijos, de unos 10 años, iban un poco a lo Indiana Jones, con sus mochilas de exploradores. A partir de esa edad se pueden hacer cosas como cursos de cocina tailandesa particulares para toda la familia. Es verdad que eso hace que cueste un poco más, pero si se puede seguro que salen encantados.

En ese caso, qué recomendaríais a una familia como la nuestra que quiere viajar a Tailandia con sus hijos

Hay visitas seguras como son el serpentario de la Cruz Roja de Tailandia o en Ocean World, ambos en Bangkok. En el serpentario te enseñan cómo sacan en veneno para sus investigaciones y hay terrarios con serpientes y un pequeño museo. Es un imprescindible si se va a Bangkok con niños. Oceanarios hay en bastantes ciudades, pero no importa cuantas veces hayas visto a los tiburones y a los pingüinos que jamás te cansas. Hablando con una trabajadora del centro me contaba que después de años trabajando en el centro no podía plantearse cambiar de trabajo porque su hija no se lo perdonaría. La verdad es que en función de la edad cambian mucho los intereses de los chicos y las condiciones del viaje.

Por ejemplo, el contacto directo que pueden tener con los elefantes es fantástico y muy divertido, no vale cualquier sitio pero hay campos en los que los tratan con mimo y los visitantes pueden aprender cosas interesante sobre ellos y montar a pelo en el que por un rato es su elefante. El baño final en el río es la guinda del pastel.

Otro truco, en las playas en las que se hace snorkel es divertido llevar unos cuantos trozos de fruta y ver como cientos de peces se arremolinan junto a ti, en ocasiones te confunden con su almuerzo y te dan pequeños pellizquitos. Los niños se lo pasan pipa.

¿Y en cuanto al ritmo de viaje?

Es muy frecuente que en las excursiones y circuitos que comercializan las agencias apuesten más por la cantidad que por la calidad de las visitas. Cuantas más hay por el mismo precio parece que el viaje es mejor, quizá no. Esto es muy importante con niños, además de ‘negociar’ el plan del viaje para que haya un poco de lo que apetece a cada uno, su ritmo no puede ser el mismo. Hay algunos templos budistas que no son las estrellas del lugar pero que igualmente merecen la pena y son más propicios para ir con niños.

El clima también es en este caso crítico. El país en general y Bangkok en particular es cálido y húmedo por lo que el tiempo que se pasa en la calle o en las visitas exteriores hay que pensarlo con antelación. Entre la 1 del mediodía y las 4 de la tarde, más o menos, el desgaste es mucho mayor al resto del día. Si no se tiene en cuenta puede que el viajero se agote y a media tarde sólo piense en volver al hotel. En muchas de nuestras excursiones incluimos la siesta (o piscina) para recuperar fuerzas y alargar la jornada, pues con niños mucho más conveniente.

Bangkok suele ser la puerta de entrada y salida del país. Si tuvieras que recomendar tres actividades para hacer en familia en Bangkok durante 48 horas ¿cuáles serían?

Bangkok es una ciudad moderna y cosmopolita por lo que su oferta es amplia y variada. Pensando en sitios interesantes para niños y un poco singulares se me ocurre recomendar los siguientes:

Un templo, el Wat Saket en la Montaña de Oro. Situado en lo alto de una colina en el centro de Bangkok tiene fácil acceso y ofrece unas excelentes vistas de la ciudad. Encontrarán también algunos gongs que hacer sonar con su sonido vibrante y profundo.

Como ya hemos dicho antes, un imprescindible es el moderno Serpentario de la Cruz Roja de Tailandia, hay pocos en el mundo y además de la fascinación y el temor que las serpientes provocan en los niños es muy interesante ver como les extraen el veneno con fines científicos.

Finalmente, los espectáculos de títeres también son muy típicos de Oriente. Las marionetas son espléndidas y merece la pena ver cómo les dan vida 3 actores por cada una de ellas. Pueden acudir con los pequeños al Aksra Theatre.

Sabemos que Tailandia es un paraíso en cuanto a playas se refiere ¿qué zona recomendarías para familias que van con niños pequeños y por qué?

Como ocurre en España en Tailandia hay multitud de playas, cada una con su atmósfera y sus servicios. En todas ellas siempre he visto niños felices, pero hay varias playas -como Karon Beach- en la costa oeste de Phuket que son muy tranquilas y tienen una pequeña ola final de unos 30 cm sin ningún peligro pero que hace la delicia de los pequeños. Además, Phuket dispone de todos los servicios para cualquier situación.

Es muy importante tener en cuenta los monzones, según las fechas del viaje hay que cambiar de destino de playa.

De cara al verano, qué itinerario les propondríais a una familia que viaja con niños durante un par de semanas a Tailandia?

Para ser prácticos vamos a restar 3 días de los 15, en el primer día en la ciudad hay que recuperarse del largo viaje y adaptarse al nuevo horario y al clima tropical. Por lo tanto tenemos 12 días en Tailandia, perfecto para 3 etapas y quizá una extensión, dependiendo de la edad de los chicos y los intereses de la familia.

Comenzar en Bangkok es lo ideal, un chapuzón total en una cultura muy distinta y en una capital apasionante. Llegamos con nuestra mayor ilusión y es el momento de ‘patearse’ la ciudad. Tener en cuenta que Bangkok es muy especial, un poco caótica y de clima cálido y húmedo, lo que exige panificar bien las visitas, mucho más si se viaja con niños. Nuestra sugerencia, entre 3 y 5 noches si se hacen excursiones a los alrededores.

Chiang Mai. En los viajes el contraste siempre es bienvenido. Chiang Mai es una ciudad mucho más tranquila y acogedora, con bellísimos templos budistas que recrean una atmósfera serena y amable. Es un destino para visitar algunos de estos templos, sus mercados y también para disfrutar de su exuberante entorno natural. La visita a un campo de elefantes (en el que los cuiden con mimo) es casi una obligación si se viaja con niños, pero hay muchas más cosas que hacer. Si los chicos son mayores, la tirolina en el bosque o el rafting les encantará, o quizá un curso de cocina tailandesa en familia. Entre 3 y 5 noches.

Desde Chiang Mai hay dos extensiones interesantes. Mae Hong Son es una preciosa localidad al oeste a la que se accede mejor por avión, razón por la que es menos visitada y resulta ser más especial. Es un destino de naturaleza y tribus de las montañas, ideal para la familia.

Desde Chiang Mai hacia el noreste se encuentra Chiang Rai y el famoso Triángulo del Oro. Un viaje interesante con el mítico río Mekong como destino que hay que preparar bien y dosificar las paradas porque se recorre una distancia larga.

Finalmente las playas. De junio a agosto es recomendable el Golfo de Tailandia, como pueden ser las islas de Ko Samui, Ko Phangan o Ko Chang. Al menos 3 noches para relajarse en la playa antes de volar a Bangkok.

Para finalizar, ¿qué aportaría Naaî Travels a una familia que quisiera descubrir Tailandia en familia?

Buena parte de la información la ofrecemos a través de nuestra guía de Tailandia como ocurre con el vídeo Bangkok con niños.

Como profesionales que conocemos Tailandia podemos ayudar a diseñar el viaje que más se ajusta a cada familia. Por ejemplo, si hay una excursión que interesa a los mayores pero que es un poco larga, haremos que el vehículo de transporte (normalmente una minivan) tenga asientos de sobra y añadiremos unos cuantos cojines para que les sea más fácil coger el sueño. O, también, si uno de los niños es mal comedor, le diremos a la guía que lleve un salero (no es lo habitual) de manera que en cualquier etapa es posible un arroz con pollo o huevo frito sin especias ni picante, más fácil de comer.

A la hora de planificar las actividades de cada día, por ejemplo en Bangkok, además de contar con nuestra opinión, podemos orientar a la familia en la mejor forma de desplazarse y el tiempo que le va a llevar, de manera que sabe por adelantado si puede hacer las dos visitas en una mañana o la hora en la que conviene salir del hotel.

También conocemos casi todas las playas que, como en España, cada una tiene su atmósfera y sus servicios, así que podemos recomendar una u otra para ir sobre seguro.

Y, finalmente, si pasa algo inesperado, estamos allí.